Si es conocida Mérida es por sus orígenes romanos. Lugar de descanso para los soldados retirados de las legiones romanas, dejaron huella de su paso a través de numerosos construcciones y edificios que hoy podéis visitar. Os proponemos una guía con las monumentos que no debéis perderos.
Teatro y Anfiteatro.
Os recomendamos que visitéis el conjunto arqueológico que forman el Teatro Romano y el Anfiteatro.
De hecho, el teatro sigue teniendo hoy en día, la misma utilidad que en sus inicios con las representaciones que tienen lugar cada verano con el Festival de Teatro Clásico.
Museo de Arte Romano.
Otro edificio emblemático es el Museo de Arte Romano (obra del arquitecto Rafael Moneo) que alberga una de las exposiciones de arte romano más importantes destacando sus mosaicos y esculturas.
Templo de Diana.
Es el único monumento destinado al culto religioso que queda en pie del cual se conserva gran parte de las columnas que lo sostenían.
Circo romano.
Otro de los edificios construidos destinados a los espectáculos que se celebraban en la ciudad y de los que aún quedan resto es el circo máximo, donde se disputaban las carreras de cuadrigas.
Arco de Trajano.
Puerta de entrada que daba acceso a uno de los templos de culto imperial y próximo al foro provincial. Por desgracia, hoy en día sólo podemos ver los moldes que sustentaban la gran estructura que antaño fue.
Acueducto de los milagros.
Otra de las obras que dejaron los romanos es el acueducto que abastecía de agua a la ciudad desde el embalse de Proserpina que también construyeron.
Hasta aquí una muestra de lo que podéis ver, pero hay más y siguen produciéndose nuevos hallazgos por lo que os aconsejamos que paséis por las oficinas de Turismo de Mérida para informaros y aprovechéis al máximo vuestro paso por esta ciudad histórica.
¡Esperamos que os guste!.
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